TECNOKEL AMINO B se recomienda para todos los cultivos: árboles frutales, girasol, colza, verduras, viñedos, ornamentales y otros.
Aplicación foliar:

Este producto se recomienda para uso como complemento de todos los programas de fertilización. Para lograr los mejores resultados aplicar TECNOKEL AMINO B en la fase de las floraciones activas de los cultivos, después de lluvia o riego. Compatible con la mayoría de los productos fitosanitarios utilizados. Recomendamos una prueba preliminar de miscibilidad. Al mezclar, siga el orden: agua, TECNOKEL AMINO B y el Pesticida. El boro participa en la formación del polen, ayuda al desarrollo de las semillas y la formación de frutos. El Boro ayuda a transportar calcio y azúcares y participa en el metabolismo de las auxinas.

Reduce las alteraciones fisiológicas, como (el riesgo de): manchas amargas en las manzanas, óxido en las peras, grietas en los frutos de las plantas, pulpa de remolacha negra.

Participa en el crecimiento y la diferenciación de las células y mejora la densidad de los tejidos.

Optimiza el crecimiento de las raíces y la formación de nuevas ramas.

Gracias a la formula única del TECNOKEL AMINO B  de etanolamina con un complejo de aminoácidos  se logra la movilidad óptima de los elementos dentro de la planta y el suministro de boro en estos órganos vegetativos donde la necesidad de este elemento es más necesaria. Las propiedades de aglutinante de la etanolamina aumentan la tasa de absorción de boro y mejoran su solubilidad.

Así la presencia de aminoácidos libres y la penetración del elemento a través de la superficie foliar y su movilidad dentro de la planta mejoran enormemente la eficiencia de la alimentación de la hoja.

La deficiencia de boro ocurre en hojas jóvenes, ya que los nutrientes no pueden pasar de las hojas viejas a las jóvenes. En la remolacha azucarera, la grave escasez de boro conduce a la pudrición de la pulpa. El crecimiento de la remolacha para.

El tratamiento se realiza utilizando cualquier tipo de pulverizadores activados en serie. En el tanque desinfectante o el aspersor se vierte agua V* del volumen total, se agrega la cantidad necesaria de fertilizante a la mezcladora activada, se vierte más agua hasta el volumen especificado, la solución se mezcla y el tratamiento se realiza.